Materiales de Construcción

En regiones cálido húmedas el uso y selección del material para las superficies interiores o exteriores de una vivienda es determinante para controlar la ganancia de calor al interior de la edificación. La mayoría de las veces los materiales de construcción ocasionan problemas ambientales no por deficiencias en su calidad sino por la incorrecta instalación y escogencia por parte del constructor.

Para asegurar un adecuado comportamiento climático en la edificación, es necesario conocer la capacidad que tiene cada material para conducir el calor así como los  tratamientos con base en colores, espesores, cámaras de aire o sistemas de barrera radiante, que ayuden a disminuirlo. Dichos procedimientos podrán aplicarse de forma aislada o combinada y son decisivos para reducir la temperatura interior de la vivienda y lograr espacios confortables y de  mantenimiento razonables.

PROPIEDADES TÉRMICAS DE LOS MATERIALES

EMISIVIDAD:

es la capacidad que tiene un material para intercambiar calor con otros cuerpos que se encuentren a su alrededor y a diferente temperatura. En clima cálido húmedo los materiales exteriores de la vivienda con mejor resultado son la pintura blanca y la cal, ya que emiten gran parte del calor que reciben.  

REFLECTIVIDAD:

un material es reflectivo cuando la energía que llega hasta él rebota al chocar con su superficie, cambiando la dirección pero no sus propiedades

energéticas, es decir, si llega en forma de luz rebotará en forma de luz.

Por ello se recomiendan para la Depresión Momposina, las superficies blancas, metálicas y aquellas con colores muy claros y más aún si tienen acabados muy pulidos o brillantes, siempre y cuando no generen deslumbramiento a su alrededor. El asbesto cemento es  reflectivo pero va disminuyendo su efectividad  hasta 4 veces  en un año.

ABSORTIVIDAD:

la energía que llega al material si no se refleja entonces se absorbe transformándose en calor. Los mejores absorbentes son los cuerpos negros, el asbesto cemento y el concreto. Es importante cubrir estos materiales absorbentes con pinturas reflectivas para disminuir el flujo de calor  principalmente en el techo. Pero si el material es translúcido como un vidrio por ejemplo, una parte del calor será reflejado, otra porción  absorbida, mientras que una última será transmitida hacia interior del espacio.

CAPACIDAD TÉRMICA DEL MATERIAL:

Tiene que ver con el espesor de las superficies que envuelven al edificio y se define como la facultad que tiene un  muro o cubierta para almacenar  calor.

Para lugares cálido húmedos se recomiendan las estructuras de baja capacidad térmica o "respuesta rápida", las cuales ganan y pierden calor en poco tiempo. Resultan convenientes los materiales livianos como la madera, bahareque o palma; estos materiales guardan durante el día una menor cantidad de  calor y de esta manera están rápidamente más frescos una vez se hace de noche.

No obstante, puede aplicarse con buenos resultados el efecto contrario; las viviendas tradicionales construidas con materiales pesados como el ladrillo macizo, paredes de tierra y placas de concreto, almacenan y demoran el paso del calor hasta el interior, marcando en el día una diferencia y reducción de la temperatura interior respecto a la del exterior. El calor retenido durante el día es  liberado en la noche, haciendo que la vivienda permanezca más caliente que el exterior en esas horas.

EL COLOR 

                                                                                                                                                       

Los colores  exteriores de la vivienda  influyen en la absorción y reflexión de la radiación solar. Para clima cálido húmedo se recomiendan los tonos claros porque tienen alta reflectividad y logran reflejar buena parte de los rayos de sol que inciden sobre ellos. Por el contrario los colores oscuros pueden alcanzar  temperaturas superiores a la del aire exterior, ya que absorben una mayor cantidad de energía radiante.

                                                                                                                                                              

EFECTOS DE LA HUMEDAD

Los materiales absorben humedad de acuerdo a su porosidad. El agua actúa como un conductor de calor. Por ello se recomienda usar materiales que sellen los poros, como por ejemplo los materiales impermeabilizantes que a modo de pintura reducen la absorción, permitiendo mantener los muros más secos para que conduzcan el  calor más lentamente.

DETERIORO DE LOS MATERIALES

Los materiales se desgastan rápidamente cuando están expuestos directamente a agua y al sol. Otros agentes biológicos como moho, hongos o comején de igual manera ocasionan daños si las superficies no se protegen  con materiales inmunizantes o no cuentan con la debida impermeabilización.

espero te hayan sido de gran ayuda para lo que deseas lograr en tu hogar o la distribución de los espacios, incluso son diseños son muy modernos que podrás aprovechar de la mejor manera, gracias por su atención prestada.